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Encuentros Diarios
Noviembre 16, 2017
Educados o Ilustrados?
Jesús dijo, "Ésta es la causa de la condenación: que la luz vino al mundo, pero la humanidad prefirió las tinieblas a la luz, porque sus hechos eran perversos. Pues todo el que hace lo malo aborrece la luz, y no se acerca a ella por temor a que sus obras queden al descubierto."1
Epicteto, quien vivió éntrelos años 55 y 135 D.C. dijo, "Solo los que tiene educación están 'liberados'."
Es cierto que hay verdad en las palabras de Epicteto. Por un lado, los dictadores no desean que la gente bajo su control estén educados. Los dictadores controlan a las personas a través de la ignorancia y el miedo. Si las personas tuvieran una educación, y especialmente si estuvieran ilustrados, las rebeliones se incrementarían considerablemente. Esta es una razón del por qué es importante que la gente en todas partes tengan una educación—o al menos estén ilustrados.
¿Por qué ilustrados? Porque hay millones de tontos educados y criminales que están altamente calificados, pero uno podría a duras penas llamarles ilustrados a estas personas. Estas personas viven en las "tinieblas". Como lo Jesús dijo, "Pues todo el que hace lo malo aborrece la luz, y no se acerca a ella por temor a que sus obras queden al descubierto."
La educación tan importante como lo es, por si misma no nos da sabiduría, comprensión o carácter moral, o nos hace ilustrados.
En la palabra de Dios las tinieblas son simbólicas del Diablo mientras que la luz simboliza la verdad. Para ser ilustrados, necesitamos "caminar en la luz;" esto es caminar en la verdad, abiertamente y con honestidad. Porque solo la verdad libera a las personas. Como lo dijo Jesús, Si se mantienen fieles a mis enseñanzas, serán realmente mis discípulos; y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres."2
¿Así que la pregunta es estamos ilustrados?
Se sugiere la siguiente oración: "Querido Dios, gracias de nuevo por tu Palabra que me enseña como ser ilustrado. Ayúdame a siempre caminar en la luz y a ser no solamente ilustrado, pero también a encontrar la libertad verdadera. Gracias por escuchar y responder a mi oración. Con gratitud, en el nombre de Jesús, amén."
1. Juan 3:19-20 (NVI).
2. Juan 8:31-32 (NVI).
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