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Encuentros Diarios
Agosto 10, 2018
Falta de armonia mental
"Aférrate a tu fe en Cristo y mantén limpia tu conciencia. Pues algunas personas desobedecieron a propósito lo que les dictaba su conciencia y, como resultado, su fe naufragó."1
Alguien señaló que "Si no vivimos la vida que creemos, terminaremos viviendo infelizmente la vida que vivimos."
Hace tiempo visité el Instituto de Ciencia Moody y me puse un extraordinario par de lentes que hizo que todo pareciera boca abajo. ¡Hablando de trastornos mentales! En un experimento el fundador del Instituto, Irwin Moon, llevó puestos estos lentes día y noche durante tres semanas y dormía con los ojos cubiertos para no mirar nada sin tener los lentes puestos. Después de tres semanas su mente había convertido todo y las cosas parecían estar derechos.
La mente hace algo similar cuando no vivimos en armonía con las directivas de Dios. Por ejemplo, el alcohólico niega su alcoholismo. La persona que constantemente miente, termina creyendo sus propias mentiras. Y los criminales a menudo justifican lo que han hecho convencidos de que las personas que han victimado se lo merecían.
Hacemos esto ya que si constantemente vamos en contra de lo que sabemos que es lo correcto, nos metemos en lo que se denomina disonancia cognitiva, lo que, en pocas palabras, significa falta de armonía mental. Y al no poder vivir con esta angustia, cambiamos nuestras creencias para que coincidan con nuestro comportamiento. De esta manera justificamos lo que sea que queremos hacer.
Es cierto, si no vivimos la vida que creemos, terminaremos viviendo infelizmente la vida que vivimos. Es un peligroso camino a seguir. Otra forma de decirlo es, terminamos con una conciencia muerta y un corazón endurecido.
Se sugiere la siguiente oración: "Querido Dios, ayúdame a nunca negar ningún comportamiento negativo pecaminoso, pero a ser honesto conmigo mismo y admitirlo cuando lo que estoy haciendo está mal, confesártelo—y a una persona de confianza o un consejero de ser necesario—para siempre poder vivir en un estado de armonía mental. Gracias por escuchar y responder a mi oración. Con agradecimiento, en el nombre de Jesús, amén."
1. 1 Timoteo 1:19.
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