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Encuentros Diarios
Julio 02, 2019
Fórmula Para Resolver Problemas
“Y si alguno de ustedes tiene falta de sabiduría que la pida a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.”1
La siguiente fórmula para resolver problemas, creo que es de Norman Vincent Peale. El dijo que había que visualizar, orar y actualizar.2
Primero, visualizar. Necesitamos ver el problema por lo que es. Muy seguido lo que vemos no es el problema—es el síntoma de un problema oculto, el fruto de raíces ocultas. Como lo dijo alguien, “Dios es piadoso. Cuando tenemos problemas él nos da síntomas.” Solo cuando vemos la verdadera causa de nuestros problemas y enfrentamos la realidad podemos resolver las dificultades que tenemos. Una vez que vemos y aceptamos la verdad, es entonces que necesitamos visualizar lo que necesitamos hacer para resolver nuestro problema así como visualizar lo que le estamos pidiendo a Dios que haga por nosotros.
Segundo, orar. Pidan a Dios que les de la sabiduría y el valor para ver y enfrentar la causa o causas reales detrás de sus problemas. Solo entonces podrá orar de manera realista al entregar sus problemas a Dios y pedirle su guía para ayudarlos a encontrar una solución y el valor para poner lo que sea necesario de su parte.
Tercero, actualizar. En cada situación necesitamos comprender que somos responsables de resolver nuestros problemas. No importa lo que pase con nosotros, siempre somos responsables por nuestras reacciones, sentimientos, y lo que hacemos para resolver nuestras dificultades. Dios nos dará sabiduría si se la pedimos, perspicacia si así lo deseamos, y el valor de ser necesario, pero él no hará por nosotros lo que necesitamos hacer por nosotros mismos. Si él lo hiciera, eso nos mantendría siendo dependientes e inmaduros. El corazón de la madurez está en aceptar responsabilidad por nuestros problemas, emociones, comportamientos y nuestras vidas.
Se sugiere la siguiente oración: “Querido Dios, dame la sabiduría y el valor para ver y enfrentar cada síntoma en mi vida y ayúdame a encontrar la causa o causas, y guíame hacia la ayuda que necesito para resolver estos problemas para poder sanar y ser una persona completa. Gracias por escuchar y responder a mi oración. De todo corazón en el nombre de Jesús, Amén.”
1. Santiago 1:5.
2. Norman Vincent Peale, Positive Imaging.
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