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Encuentros Diarios
Julio 28, 2021
Un desastre hermoso: Rahab
"Rahab, la
prostituta, es otro ejemplo. Fue declarada justa ante Dios por sus acciones
cuando ella escondió a los mensajeros y los ayudo a regresar sin riesgo alguno
por otro camino."1
"Fue por la fe
que Rahab, la prostituta, no fue destruida junto con los habitantes de su
ciudad que se negaron a obedecer a Dios. Pues ella recibió en paz a los espias."2.
La imagen juega un
papel importante en la sociedad actual. Las personas que son generosas podrían
ser conocidas como altruistas. A las personas que extienden una mano a los
menos afortunados les gusta ser conocidas como Humanitarias. Los que ven lo
positivo en todo son optimistas. Pero imagínese tener que ir a través de la
vida conocida por su mayor pecado - Moisés el Asesino, David el Adúltero, Jacob
el Engañador. Dejar que otros sepan cuáles son nuestras luchas puede ser humillante.
En su mayor parte nos gusta mantener nuestras cosas feas cubiertas y no ponerlas en exhibición para que otros juzguen. Y cuando
se trata de asuntos espirituales nos escondemos detrás de pecados pasados y
pensamos: "Dios nunca podría usar a alguien como yo". Pero Dios nos
ha mostrado a través de las Escrituras que Él usará a aquellos que estén
dispuestos a ser usados por Él para hacer grandes cosas por el Reino de Dios.
En el libro de Josué, en el Antiguo Testamento, conocemos a Rahab, mejor
conocida como Rahab la Prostituta. Una mujer conocida en la ciudad por la
posada que guardaba y los servicios que allí ofrecía. No era inusual que ella
recibiera invitados masculinos, pero fue esta misma situación la que Dios
eligió para voltear las cosas y usar para Su gloria. El pueblo de Dios, los
israelitas, necesitaba colocar dos espías dentro de las murallas de la ciudad y
Rahab, a pesar de su reputación, estaba lista y dispuesta a ser utilizada por
Dios. Ella ayudó a los hombres proporcionándoles refugio, y a cambio Dios la
protegió a ella y a toda su familia cuando la ciudad cayó.
La estación de Rahab
en la vida y el hecho de que se hace referencia a ella varias veces en la
Biblia, nos recuerda que Dios ofrece Su salvación a los pecadores y no sólo a
aquellos a quienes la sociedad clasifica como "buenos". Nuestro
pasado no nos define, más bien son las decisiones que tomamos cuando venimos a
Cristo las que definen quiénes somos en Él. Fue la elección de Rahab, en lugar
de su pasado, lo que la definió para nosotros hoy. Su fe en Dios la colocó
entre los grandes en el Salón de la Fama de la Fe que se encuentra en Hebreos
11. ¡Y aún más, ella tuvo el privilegio y el honor de ser parte de la
ascendencia de Jesús! Así que, ya ven, no tenemos que ser perfectos y sin
pecado para que Dios nos use de maneras grandes y significativas. Él se
encontrará con nosotros donde estamos. Él ve justo más allá de lo feo y al contrario ve nuestros corazones donde encuentra nuestro valor.
Oración sugerida:
Querido Amoroso,
Padre Celestial, me has visto en mi peor momento y me has amado. Me siento
humillado por la misma idea de que elegirías tomar a un pecador feo como yo y transformarme para tu gloria. Señor, hoy estoy decidido a ser
utilizado por ti para compartir tu amor con los demás. Quiero ser definido por
las decisiones que hago, por fe, en ti. En el nombre misericordioso de Jesús,
Amén.
Santiago
2:25. Hebreos
11:31.
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