Encuentros Diarios
Julio 24, 2019
¿Para Quién Trabajas?
“Todo lo que esté al alcance de tu mano, esmérate en hacerlo según tus fuerzas.”1
No importa el tipo de trabajo que nos ocupa, cada uno de nosotros trabaja por sí mismo. Nos engañamos a nosotros mismos si pensamos diferente.
Se reporta que cuando el antiguo astronauta Frank Borman quedó a la cabeza de Eastern Airlines, estaba determinado a hacer que el servicio de su compañía fuera el mejor de la industria. En una ocasión notó que uno de sus empleados estaba sentado con los pies arriba del escritorio ignorando el teléfono que sonaba incesantemente.
“No vas a contestar el teléfono,” preguntó Borman
“Este no es mi departamento” contestó el empleado sin una señal de preocupación. “Yo trabajo en mantenimiento.”
“No, ya no trabajas,” contestó Borman.
Es la persona que es fiel en las cosas pequeñas a quien se le confían las mejores y mayores responsabilidades.
Esto es verdad en la economía de los hombres y con Dios. Como cristianos en el más allá no seremos juzgados por nuestros pecados ya que Cristo tomó el castigo por sí mismo en el Calvario. Pero seremos recompensados de acuerdo a nuestra fidelidad al servir a Dios aquí en la tierra.
El ser responsable y fiel en todas nuestras responsabilidades tiene su recompensa. Como alguien lo dijo, “la mejor habilidad es el que los demás puedan confiar en uno.” ¡De igual importancia es la responsabilidad!
Se sugiere la siguiente oración: “Querido Dios, ayúdame a que hoy y siempre esté listo para servirte y glorificarte con todo lo que soy y lo que hago. Gracias por escuchar y responder a mi oración. De todo corazón en el nombre de Jesús, Amén.”
1. Rey Salomón (Eclesiastés 9:10, NIV).
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