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Encuentros Diarios
Febrero 21, 2019
Estar Conectado
"Pero si vivimos en la luz, así como él [Dios] está en la luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de su Hijo Jesucristo nos limpia de todo pecado."1
Por varios años Ken era un hombre profesional y capaz, un trabajador de la iglesia dedicado, y un líder en su comunidad. Por afuera el funcionaba muy bien. Sin embargo, las personas encontraban difícil acercarse a Ken porque el parecía distante. Sus relaciones familiares no eran buenas y el tenia ulceras. Detectando vagamente un vacio interior, Ken se unió a un grupo de recuperación donde el descubrió que estaba reprimiendo muchas de sus emociones.
Ken todavía sigue en el proceso de descubrir de nuevo su persona reprimida. Afortunadamente, sin embargo, desde que aprendió a reconocer y expresar muchos de sus verdaderos sentimientos (muchos de los cuales estaban reprimidos y negados) en maneras saludables, sus ulceras han mejorado, y sus relaciones familiares han mejorado dramáticamente.
Desafortunadamente, muchas personas son enseñadas a ignorar sus emociones negativas. Como escribió John T. Raffa en la revista Psychology for Living: "Ellos creen que deberías esconder tales sentimientos — negar, negar, negar — y llegar a ser nada más que un robot en vez de lo que Dios nos hizo, seres con sentimientos."
Obviamente, los Cristianos tempranos no actuaban de esta manera de otra manera nunca hubieran sido conocidos por su amor el uno por el otro. Pedro, Santiago, Juan y Pablo todos enfatizaron la necesidad de ser honesto, de ser sincero, de caminar en la luz, de confesar abiertamente los pecados y fallas, y de amarse el uno al otro. Personas reprimidas son personas cerradas y son incapaces de amar plenamente y vivir plenamente. Tampoco pueden tener ninguna clase de intimidad emocional en el matrimonio y relaciones cercanas.
Solo mientras caminamos en la luz, es decir, en honestidad y ser abierto, seremos capaces de tener comunión verdadera y conexión con Dios y otras personas. Además, solo entonces seremos capaces de ser canales abiertos por los cuales el amor de Dios pueda fluir a otros, y haciendo esto podremos vivir y amar plenamente.
Oración sugerida: "Querido Dios, por favor revélame cualquier y toda barrera que tenga en mi vida que impida que me sienta cerca de ti y a otros para que pueda conocer la intimidad verdadera contigo y con mis seres queridos — y ser un canal vibrante por el cual tu amor pueda fluir a otros. Gracias por escuchar y contestar mi oración. Te agradezco. En el nombre de Jesús, amen."
1. 1 Juan 1:7 (NVI).
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