"¿Qué crees que estoy haciendo ahora?", respondió el pescador.2 

Muchas veces, me he permitido estar demasiado ocupado. Mi lista de tareas pendientes parece interminable, y me encuentro perdiendo la diversión de la vida porque estoy enfocado en hacer lo siguiente. Dios creó un mundo hermoso. Incluso él, después de trabajar duro durante seis días, vio que su trabajo era bueno. Así que descansó y disfrutó el momento. Lo que no recuerdo a veces es que el mañana no está garantizado. Podría hacer todos los planes que quiero y trabajar sin fin para hacer lo que creo que tengo que hacer, pero ahora mismo es el único tiempo garantizado que tengo. El trabajo es una parte importante de la vida, y debemos trabajar diligentemente en todo lo que hacemos; sin embargo, también debemos recordar que el equilibrio también es importante. Puede que los que nos rodean no recuerden todo el trabajo que hicimos, pero recordarán los momentos que pasamos hablando, jugando y simplemente disfrutando de la vida juntos. Tomemos un momento en cada día para disfrutar de la maravillosa creación de Dios con nuestros seres queridos. 

Oración sugerida: Querido Dios, gracias por todas las cosas hermosas que creaste para que yo disfrutara. Gracias, también, por el trabajo que me has dado para hacer. Pido que me ayudes a encontrar un equilibrio saludable y recordar vivir en el presente y disfrutar de los momentos que me das. Entonces, cuando me llames a casa, no sólo seré recordado como un trabajador duro, sino también como alguien que invirtió en relaciones con los que me rodeaban. Gracias por escuchar y responder a mi oración. En nombre de Jesús, amén.