"El camino de Dios es perfecto; la palabra del Señor es intachable. Escudo es Dios a los que en él se refugian."1 

Probablemente estés familiarizado con la historia de Zacarías y Elisabet que se encuentra en Lucas 1:5-19. Zacarías era sacerdote, y tanto él como su esposa, Elisabet, eran justos a la vista de Dios. La Biblia dice que observaron todos los mandamientos y decretos del Señor sin culpa, por lo que algunos podrían cuestionar por qué el Señor aún no había respondido a su oración de tener hijos. Elisabet no podía tener hijos, y aunque habían orado por hijos, envejecieron y aceptaron el hecho de que no tendrían hijos. ¡Pero Dios tenía un plan! Había escuchado sus oraciones, pero estaba esperando su tiempo perfecto para responder. Más tarde, Dios usaría a su hijo, Juan el Bautista, para tener un ministerio vibrante y preparar el camino para Jesús. ¡Ellos sólo querían un bebé, pero Dios tenía planes más grandes para toda su familia!  

El versículo de hoy nos recuerda que cuando nos refugiemos en Dios, Él nos protegerá. A veces esto significa que tendremos que esperar a ver cómo se desarrolla el plan de Dios, pero podemos descansar sabiendo que Su camino es perfecto e impecable. Si Dios respondiera a nuestras oraciones como queremos y de acuerdo a nuestro tiempo, nos perderíamos las bendiciones de ver cómo se desarrolla su plan y todo lo que él nos enseña en el proceso. A veces Dios no puede responder a nuestras oraciones como queremos porque él sabe que no es lo mejor para nosotros. Nuestra perspectiva y comprensión son limitadas, por lo que seríamos sabios al confiar en nuestro Dios omnisciente. Sus caminos son buenos, y su tiempo es perfecto.