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Septiembre 06, 2021

"Jesús recorrió todas las ciudades y aldeas de esa región, enseñando en las sinagogas y anunciando la Buena Noticia acerca del reino; y sanaba toda clase de enfermedades y dolencias. Cuando vio a las multitudes, les tuvo compasión, porque estaban confundidas y desamparadas, como ovejas sin pastor."¹

Con todo lo que ha estado en las noticias últimamente, me encuentro abrumado por sentimientos. He estado tratando de pensar qué decir al respecto. La situación es simplemente devastadora y hay muchas opiniones sobre lo que debemos o no debemos hacer a continuación, pero en lugar de aumentar el ruido, quiero tomarme un momento para escuchar a Dios en medio de ello. Es difícil ver lo que está sucediendo en todo el mundo y sentir que hay tan poco que pueda hacer para ayudar. Todas las vidas perdidas, la violencia, la desesperación, el dolor... Le pregunté al Señor: "¿Qué puedo hacer?" Fue entonces cuando me vinieron a la mente las palabras "rompe mi corazón por lo que rompe el tuyo".

En el versículo de hoy, vemos el corazón de Jesús. Tenía compasión de las multitudes porque estaban confundidas y desamparadas... muy parecido a lo que veo en las noticias en estos días. Puede que no pueda estar personalmente con cada persona que está sufriendo, ¡pero Jesús ya está allí! Cuando realmente entendemos el corazón de Jesús, podemos orar más eficazmente por los demás. Podemos interceder por ellos ante nuestro Padre Celestial que está en todos los lugares. Podemos llegar a un punto donde nuestras opiniones no importan tanto como la conexión que podemos tener con Jesús cuando le pedimos que rompa nuestros corazones por lo que rompe el Suyo. Muchas veces, orar de acuerdo con el corazón de Dios es lo más poderoso que tú y yo podemos hacer para ayudar a nuestro mundo herido.

Oración sugerida: Querido Dios, no sé por dónde empezar, pero venir ante ti es siempre el mejor lugar para comenzar. Tanta pérdida, tragedia, dolor. Oro para que mi corazón se rompa por las cosas que rompen tu corazón. Lléname de compasión por los demás, independientemente de las opiniones. Por favor, muéstrame los próximos pasos, ya sean grandes o pequeños, sobre cómo puedo ser tus manos y pies en nuestro mundo herido. Por favor, proporciona consuelo y paz a las muchas familias que están de duelo y pasando gran sufrimiento. Ayúdame a amar a mi prójimo, tanto al lado como en todo el mundo. Gracias por escuchar y contestar mi oración. En el nombre de Jesús, amén.

1. Mateo 9:35-36 (NTV).