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Encuentros Diarios
Septiembre 17, 2021
Metas
"Los planes bien pensados y
el arduo trabajo llevan a la prosperidad, pero los atajos tomados a la carrera
conducen a la pobreza."1
Todos temenos metas. Grandes metas, como comprar una casa o casarse. Metas pequeñas, como
caminar 30 minutos todos los días. Objetivos a largo o corto plazo, como
ahorrar dinero o aprobar un examen. ¡Metas presentes como comer sano, o metas
futuras como tomar las vacaciones de su vida!
Cualquiera que sea su meta, todos
los tenemos y la prosperidad de la que habla el versículo bíblico de hoy se encuentra en el cumplimiento
de esa meta. Ver nuestros objetivos cumplidos requiere una planificación
cuidadosa. Benjamin Franklin dijo: "No
planificar, es planear fracasar". Sin un plan bien detallado y cuidadosamente pensado, probablemente
no llegaremos muy lejos con nuestro objetivo. Algunos de nuestros objetivos
requerirán trabajo duro. Perder peso y ahorrar dinero requieren sacrificio y
dedicación. Y si alguna vez has intentado hacer cualquiera de las dos cosas,
entonces sabes que hacer trampa solo te hace retroceder. Esos atajos apresurados que parecen buenos en su momento nos
acaban costando más.
Para los cristianos, la Biblia es
el Manual de nuestra vida. Estoy muy agradecida de que Dios haya visto
necesario incluir aliento para la planificación de metas. Sin embargo, rara vez
pensamos en pedirle a Dios que nos guíe en estos esfuerzos tan importantes. En
el libro de Nehemías, leemos que tenía una meta "imposible", que lo
llevó a estar en oración constante mientras se preparaba y planeaba. Con la
ayuda de Dios, fue capaz de hacer posible lo que creía imposible. Al igual que
Nehemías, nuestra respuesta debe ser la misma cuando nos enfrentamos a nuestras
metas, sin importar el tamaño.
Haga un plan, escriba los
detalles, trabaje duro y ore más duro. Dios desea vernos tener éxito. ¡Él desea
vernos prosperar!
Oración sugerida:
Gracias, Padre, por tu guía.
Gracias por la sabiduría para establecer metas realistas. Ayúdame a recordar
sacar provecho de ellos al hacer planes para mi futuro y a no dar un paso hasta
que te lo haya traído en oración. Confío en ti para que me muestres los caminos
que tienes para mí. Declaro que cumpliré mis metas en el nombre victorioso de
Jesús, Amén.
Proverbios 21:5 (NTV).
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