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Marzo 28, 2022

Un hombre nuevo

"Entonces Ananías respondió: ‘Señor, he oído hablar mucho de ese hombre y de todo el mal que ha causado a tus santos en Jerusalén. Y ahora lo tenemos aquí, autorizado por los jefes de los sacerdotes, para llevarse presos a todos los que invocan tu nombre’. ‘¡Ve!’ insistió el Señor, ‘porque ese hombre es mi instrumento escogido para dar a conocer mi nombre’ ..."1

Como cristiano, ¿alguna vez has conocido a una persona tan perdida en su camino; tan feo y con cicatrices desde el interior; tan dañado emocionalmente; que pensaste: "Esta persona NUNCA cambiará”, ”NO HAY ESPERANZA para ellos”? Personas como esta nos asustan y nos hacen pensar que no tiene sentido compartir a Jesús con ellos porque simplemente no cambiarán.

Saulo era esta persona. Sus acciones no solo eran feas, sino que también eran asesinas. Literalmente. Es recordado por estar arrogantemente de pie, sosteniendo los abrigos de aquellos que apedrearon a Esteban, un devoto seguidor de Cristo, hasta la muerte. Los cristianos literalmente temían por sus vidas cuando se trataba de Saulo. No había muchos que se atrevieran a tratar de hablar con Saulo acerca de Jesús porque todos habían decidido que no había esperanza para este hombre, ¡ÉL NUNCA IBA A CAMBIAR!

Pero Dios tenía un plan mayor para El. Un día, cuando Saulo estaba en camino para ejecutar una cacería persecutoria, Dios literalmente lo derribó de su caballo alto y lo detuvo en seco. Dios puso a Saulo en un tiempo de espera de tres días que le dio tiempo para venir al arrepentimiento y orar. Mientras tanto, Dios llamó a uno de sus más fieles, un hombre llamado Ananías, y le dijo que fuera a buscar a Saulo, porque había estado orando y estaba listo para cambiar. Ananías había oído hablar de Saulo y se asustó instantáneamente mientras tartamudeó: 'p-p-p-ero Señor', a lo que Dios respondió: "¡Ve! ¡Este hombre es mi instrumento escogido!"

El resto pasa a la historia como uno de los milagros más grandes de la Biblia. ¡A partir de ese momento, Saulo fue de hecho un hombre cambiado y proclamó el nombre de Jesús dondequiera que iba! La gente todavía temía el nombre de Saulo, y como Pablo era el equivalente de su nombre judío en griego, comenzó a usar ese nombre en su lugar. Y ese es el nombre que recordamos como uno de los más grandes misioneros de Dios: ¡El apóstol Pablo!

Dios no requiere un cambio de nombre de nosotros; requiere un cambio de corazón. Dios tiene el poder de cambiar a cualquiera de nosotros con el único propósito de proclamar Su nombre. No te rindas con esa persona todavía, como vimos en el ejemplo de la historia de hoy, ¡Dios puede usar al más feo de todos y convertirlo en un hombre nuevo!

Oración sugerida:

Querido Dios Misericordioso, eres increíble como ningún otro. Tu bondad y misericordia no tienen fin. Encuentras diamantes donde el resto de nosotros vemos rocas. ¡Gracias porque tu amor también me encontró! ¡Permíteme ver a través de tus ojos, más allá de lo feo y en los corazones de aquellos que quieres usar para proclamar tu Poderoso nombre! En el nombre de Jesús, Amén.

  1. Hechos 9:13,15.


 

 
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