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Encuentros Diarios
Mayo 27, 2022
A sus pies - Parte 1
"Hay una sola cosa por la
que vale la pena preocuparse. María la ha descubierto, y nadie se la quitara."1
María era la menor de dos hermanas solteras que vivían cómodamente, con
su hermano en un pequeño pueblo, a las afueras de Jerusalén, llamado Betania.
Jesús tenía una estrecha amistad con la familia y a menudo se quedaba en su
casa cuando estaba en la ciudad. Sabemos un poco más de María gracias a su
espíritu libre y su deseo de pasar tiempo a los pies de Jesús.
Aunque fueron criados en un hogar judío tradicional, María tenía una
opinión muy diferente a la de su hermana en cuanto a cuál era el papel de una mujer.
Estas ideas, sin duda, causaron fricción entre los dos, especialmente cuando
había trabajo por hacer y María podía ser encontrada pasando el rato en la
compañía del Señor. María vivió para los momentos en los que podía sentarse a
los pies de Jesús y escucharlo hablar. En esta ocasión en particular, ella
podía sentir la tristeza del Señor, a medida que se acercaba Su muerte. María
solo quería estar cerca de Jesús y hacer algo especial por Él, por lo que tomó un
perfume precioso, que valía el salario de un año, y procedió a verterlo sobre
los pies de Jesús y limpiarlo con su cabello. Al hacerlo, María mostró una
sensibilidad única, y su don mostró su amor incondicional por Jesús que muchos
no entendieron ese día. Fue criticada por sus acciones, ya que había personas
presentes que no entendían el amor que sentía por su Señor. Pero Jesús vino a
su rescate, sabiendo que pronto los dejaría, abrazó sus acciones. En ese día en
que había tanto que hacer, María eligió acostarse a los pies de Jesús y darle
su posesión más preciosa. Para ella, nada era demasiado bueno para Jesús, y
nada era más importante que pasar tiempo con Él.2
Cuando el ajetreo de nuestro día nos impide pasar tiempo con el Señor,
es hora de reconsiderar la calidad de nuestras vidas. Jesús anhela que abramos
nuestros corazones y hagamos espacio para Él. Trae tu posesión más preciada a
los pies de Jesús hoy. ¡Haz del tiempo con Jesús una prioridad!
Oración sugerida:
Querido Padre amoroso, qué privilegio poder pasar tiempo ininterrumpido
a tus pies, dejándome llenar de tu Espíritu. Te doy mi corazón. Te pido que me
concedas el deseo de hacer tiempo para derramarme a tus pies y darte lo mejor
de mí. En el nombre de Jesús, Amén.
Lucas 10:42. Juan 12:1-8.
El Encuentro de hoy fue escrito por: Verónica B.
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