Encuentros Diarios
Septiembre 15, 2022
Himnos Amados: Tal como soy
"Todos los que el Padre me da vendrán a mí; y al
que a mi viene, no lo rechazo."1
Charlotte Elliott
era una mujer amargada. Sufría de mala salud y una discapacidad que la había
endurecido. Una vez dijo: "Si Dios me ama, no me habría tratado de esta
manera". En mayo de 1822, un ministro suizo llamado Dr. Cesar Malan,
visitó a Charlotte en su casa en Brighton, Inglaterra. Había oído hablar de sus
enfermedades y esperaba ayudarla. Durante la cena, Charlotte perdió su temperamento
y comenzó a despotricar contra Dios y su familia en un arrebato violento. Su
familia, avergonzada por sus acciones, salió de la habitación y el Dr. Malan se
quedó a solas con Charlotte.
Mientras se
sentaba a observarla, consideró la mejor manera de acercarse a ella.
Finalmente, dijo: "Estás cansada de ti misma, ¿no? Te aferras a tu odio y
enojo porque no tienes nada más en el mundo a lo que aferrarte. En
consecuencia, te has vuelto agria, amargada y resentida".
Aturdida por su
franqueza, Charlotte le preguntó: "¿Cuál es tu cura?"
El doctor
simplemente dijo: "La fe que estás tratando de despreciar".
Mientras hablaban,
el corazón de Charlotte comenzó a ablandarse y ella preguntó: "Si quisiera
convertirme en cristiana y compartir la paz y la alegría que posees, ¿qué tendría
que hacer?"
"Te
entregarías a Dios tal como eres ahora, con tus luchas y temores, odios y
amores, orgullo y vergüenza".
"Vendría a
Dios tal como soy. ¿Es eso correcto?" Charlotte vino tal como era, y su
corazón cambió ese día. A medida que pasaba el tiempo, encontró y reclamó Juan
6:37 como su versículo especial: "... el que viene a Mí, no lo rechazo."
Años más tarde,
su hermano, el reverendo Henry Elliott, estaba recaudando fondos para una
escuela. Charlotte escribió un poema, y fue impreso y vendido en toda
Inglaterra. El folleto decía: Vendido
para el beneficio de Saint Margaret's Hall, Brighton: "El que venga a Mí,
no lo rechazare".
Debajo estaba el poema de Charlotte, ¡que
desde entonces se ha convertido en el himno más famoso de la historia!
Aunque nunca
disfrutó de buena salud, Charlotte vivió hasta los 82 años y escribió unos 150
himnos. Después de su muerte, sus seres queridos revisaron sus papeles y
encontraron más de mil cartas que había guardado en las que la gente expresaba
su gratitud por la forma en que este himno había tocado sus vidas.
Tal como soy, sin más decir,
Que a otro yo no puedo ir,
Y Tu me invitas a venir;
bendito Cristo, heme aquí.2
Oración sugerida:
Querido Dios, gracias por tu muerte en la cruz que hizo posible que yo viniera
a ti tal como soy. Pasas por alto mi "fealdad" y me aceptas con todos
mis defectos humanos. ¡Estoy muy agradecido por Tu amorosa bondad y perdón! En
el nombre de Jesús, Amén.
Juan
6:37 (NVI). Himno "Tal Como Soy" de
Charlotte Elliot.
El Encuentro de
hoy fue escrito por: Verónica B.
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