Encuentros Diarios
Agosto 10, 2023
¡Que se escuche la alabanza!
"Alrededor de la medianoche, Pablo y Silas estaban orando y cantando himnos a Dios, y los demás prisioneros escuchaban."1
Durante los últimos veinte años, al menos, me he acostumbrado a tocar música de alabanza cada vez que me subo a mi automóvil. Solía viajar al trabajo todos los días, por lo que llenar mi alma con adoración era esencial para mantener mi actitud positiva y amable en todas las circunstancias porque cuando alabas a Dios, ¡es muy difícil que los pensamientos negativos entren! A medida que mis hijos han crecido, ellos también han adquirido el hábito de escuchar la adoración cuando conducimos. Ellos son los que ponen nuestra lista de alabanza favorita, incluso sin que yo diga una palabra. En los días buenos y en los días difíciles, conducimos, levantando nuestras voces en alabanza, y no puedo evitar pensar en todas las cosas asombrosas que Dios ha planeado en todo esto.
El otro día, sonó una canción e inmediatamente me cautivó la letra:
"Mi alabanza es un arma que silenciara
A todo enemigo y a toda ansiedad.
Adorare, Te adorare…
Se que los muros caerán
Gigantes vencerás
El temor huira al adorarte
Yo sé que Dios conmigo esta
Por siempre reinara
Con la creación me uno a adorarte."2
A menudo pienso en el apóstol Pablo y en todos los desafíos que enfrentó. En el versículo de hoy lo vemos sentado con Silas en prisión, después de haber sido severamente golpeado. Para evitar que escaparan, el carcelero los había puesto en el calabozo interior y había sujetado sus pies en el cepo. Las cosas no parecían prometedoras, pero incluso entonces levantaron sus voces en oración y alabanza al Señor. Entonces, de repente, hubo un terremoto masivo que sacudió toda la prisión, ¡y todas las puertas se abrieron! El carcelero, pensando que todos habían escapado, estaba a punto de suicidarse cuando Pablo lo detuvo. Ese carcelero llegó a conocer a Cristo como su Salvador esa noche. Dios puede hacer cosas asombrosas cuando elegimos alabarlo y elevarlo alto en todas las circunstancias, ¡y es en los momentos más oscuros cuando nuestra alabanza debe sonar más fuerte!
Oración sugerida: Querido Dios, sólo Tú eres digno de mi alabanza. Siempre eres bueno, y Tus planes son buenos. Dame un corazón de adoración y ayúdame a ser un ejemplo de fe y alabanza a los demás, para que ellos también lleguen a conocerte. Gracias por escuchar y contestar mi oración. En el nombre de Jesús, amén.
1. Hechos 16:25 (NTV).
2. "We Praise You (A Ti Adoramos)" por Brandon Lake. 2020.
El Encuentro de hoy fue escrito por: Crystal B.
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