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Enero 08, 2020

"Conforme a lo dicho por el Señor…  el Señor mismo descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, y los muertos en Cristo resucitarán primero.  Luego los que estemos vivos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados junto con ellos en las nubes para encontrarnos con el Señor en el aire. Y así estaremos con el Señor para siempre."¹

Con respecto al cielo, hemos sido dados la evidencia de aquellos que han tenido experiencias cerca de muerte y de lo que ellos fueron testigos, los testimonios de las últimas palabras de personas famosas incluyendo los de aquellos que no eran creyentes, y la experiencia de un amigo muy cercano mientras el dejaba esta vida. Todos estos son muy interesantes, pero el punto final es la evidencia más poderosa de todas con respecto a la pregunta si hay un cielo o no.

Cuarto, tenemos evidencia del mismo  Jesucristo y la Palabra de Dios entera, la Biblia. Hablando acerca del cielo, Jesús dijo, "No se angustien. Confíen en Dios, y confíen también en mí. En el hogar de mi Padre hay muchas viviendas; si no fuera así, ya se lo habría dicho a ustedes. Voy a prepararles un lugar. Y si me voy y se lo preparo, vendré para llevármelos conmigo. Así ustedes estarán donde yo esté."² Mientras ministraba aquí en la tierra, Jesús mencionaba repetidamente el cielo para que fuera claramente evidente que Jesús creía en ambos el cielo y el infierno.

Además, según un erudito de la Biblia, hay 1,845 referencias al regreso de Cristo a la tierra que están escritos en el Antiguo Testamento y 318 en el Nuevo Testamento. Hay muchas más referencias acerca del cielo y el infierno. Y Jesús dijo que ahorita está preparando el cielo para todos los cristianos y, cuando todo esté listo, regresara para llevarnos a estar con él para siempre.

Nadie puede comprobar que hay un cielo y un infierno. Tampoco pueden comprobar que no lo hay. Sin embargo, la evidencia confirma que hay ambos, y yo sé donde quiero estar yo. Si creo, no tengo nada que perder y todo por ganar. Pero si no creo, tengo todo que perder y nada por ganar.

La opción de creer o no creer es decisión individual de cada persona. Para aquellos que decidan creer, la clave es estar seguros que estamos preparados para el cielo y listos para conocer a Dios cara a cara. Hacemos esto, primeramente, por medio de creer que cuando Jesús murió en la cruz hace 2,000 años, el murió para pagar el precio por nuestros pecados; segundo, por medio de confesar nuestros pecados a Dios; y tercero, por medio de responder al llamado de Cristo de aceptarlo dentro de tu corazón y en tu vida como tu Señor y Salvador personal.

Lo maravilloso es que la invitación de Dios para ir al cielo está abierta a todos. Como dice la Palabra de Dios, la Biblia, "Quien quiera puede venir."³

Si todavía no lo has hecho, ¿aceptaras la invitación de Dios de venir a el por medio de confesar que eres un pecador que necesita el perdón y aceptar a Jesucristo como tu Señor y Salvador personal? ¿Hoy? Para recibir ayuda para estar absolutamente seguro que estás listo para el cielo asegúrate de leer el artículo, "Como Saber Que Es Cristiano Autentico (sin tener que ser religioso)" en: www.actsweb.org/sp/conocer_a_dios1.php. Recibiendo a Jesús como tu Salvador es tu Pasaporte para entrar al Cielo. Hagas lo que hagas, no te vayas de este mundo sin él.

Oración sugerida: "Querido Dios, de nuevo te doy gracias por tu promesa que el cielo es para toda aquel que crea en ti y ha aceptado a Jesús como su Salvador. Yo creo que Jesús murió en la cruz por mis pecados. Confieso que soy un pecador y te pido, Señor Jesús, que me perdones por todos mis pecados, y que entres a mi corazón y a mi vida y que seas mi Señor y Salvador. Gracias por escuchar mi oración, por perdonar mis pecados, y por tu promesa de un hogar en el cielo. Te agradezco. En el nombre de Jesús, amen."

1. 1 Tesalonicenses 4:15-17 (NVI).
2. 2 Juan 14:1-3.
3. Apocalipsis 22:17.


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