| |
Encuentros Diarios
Enero 14, 2013
Tiranía de el Urgente
"Todo tiene su momento oportuno; hay un tiempo para todo lo que se hace bajo el cielo: un tiempo para nacer y un tiempo para morir, un tiempo para plantar y un tiempo para cosechar, un tiempo para matar y un tiempo para sanar … para destruir … para construir … para llorar … para reÃr … para estar de luto … para saltar de gusto … para esparcir piedras … para recogerlas … para abrazarse … para despedirse … para intentar … para desistir … para guardar … para desechar … para rasgar … para coser … para callar … para hablar … para amar … para odiar [y] un tiempo para la guerra y un tiempo para la paz."1
Muchos en nuestra cultura occidental, o la gran mayorÃa de nosotros, sentimos que nunca hay suficiente tiempo para hacer todo lo que queremos hacer. Yo definitivamente me puedo identificar con eso.
En un proyecto de investigación, Ipsos, una empresa de investigación del mercadeo global, anuncio que 64 por ciento de Americanos probablemente estuvieran de acuerdo con esto, "Nunca hay suficiente tiempo en el dÃa para hacer todo lo que quiero hacer." Y no son solamente Americanos que se sienten de esta manera. Es lo mismo en mi tierra natal de Australia.
Gordon Govier, un periodista que trabaja con una organización de compañerismo Cristiano llamado Intervarsity escribió, "Cuando Charles Hummel escribió 'TiranÃa de el Urgente,' en 1967, el identifico el teléfono como unas de las cosas que más nos roban la paz y tranquilidad. Y eso fue antes de que lo cargáramos para todos lados con nosotros y estuviera equipado para email, computadoras, cámaras, y música.
"El problema," dijo Hummel, "no es tanto la falta de tiempo sino un problema de prioridades." O, como dijo una vez un supervisor de una fábrica de algodón, "El peligro más grande es permitir que las cosas urgentes resalten más que las importantes."2
Que tan cierto es esto.
Como Jesús, nosotros también, en medio de nuestras agendas ocupadas, necesitamos apartarnos y descansar un rato—antes de que nos deshagamos.
Oración sugerida: "Querido Dios, ayúdame a darme cuenta que hay tiempo para hacer lo que necesito hacer hoy. Ayúdame a mantener mis prioridades en orden, y hacer lo que necesito hacer y soltar lo demás. Gracias por escuchar y contestar mi oración. Te agradezco. En el nombre de Jesús, amen."
1. Eclesiastés 3:1-8 (NVI).
2. Gordon Govier, "Handling the Tyranny of the Urgent," Assist News Service, http://tinyurl.com/b3usy.
<:))))><
|
|