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Junio 19, 2013

Jesús dijo, "No teman a los que matan el cuerpo pero no pueden matar el alma. Teman más bien al que puede destruir alma y cuerpo en el infierno."¹

El Infierno. No es un tema popular de ninguna manera. Y estos días no es un tema popular o políticamente correcto para predicar, escribir o hablar acerca de ello como si fuera una realidad. Para muchos, el infierno es un lugar que esperan que no exista y, si existe, no esperan ir allí. Para otros, el infierno es un producto de su imaginación de un cuento viejo, o un lugar para maldecir que vayan las personas que no le caen bien. Muchos creen que la muerte es el final de todo.

Piense de desastres naturales tal como el Huracán Sandy que causo devastación sobre cientos de millas en los estados del este de los Estados Unidos, o el Huracán Katrina que causo a la ciudad de Nueva Orleans que fuera hundida sin esperanza y a causa de esto miles fueron atrapados y muchos perdieron sus vidas. Que tan impensable seria que las personas "en poder" conocieran acerca de estos desastres venideros y no les hubieran advertido a las personas que evacuaran áreas que estaban dentro de las zonas de peligro. ¿Y qué tan trágico fue para aquellos que pudieran haberse ido pero fallaron en escuchar las advertencias repetidas? Que más grande la tragedia de no dejarle saber a las personas acerca de la advertencia que la Palabra de Dios ha dado claramente para que todos escapen de la ira venidera del infierno. De hecho, Jesús hablo más acerca del infierno que del cielo. C.S. Lewis escribió, "No hay doctrina que yo voluntariamente removiera del Cristianismo más que el Infierno… pero tiene el pleno apoyo de las Escrituras y específicamente de las mismas palabras de Jesús."

La Biblia describe el infierno como un lugar de completa oscuridad… también como un lago de fuego que arde día y noche para siempre. Si es literal o figurativo yo no lo sé. Lo que sí sabemos es que Jesús describió el infierno como un lugar de tormento eterno. Es un lugar que fue preparado para el diablo y sus ángeles caídos/demonios — un lugar donde irán aquellos que nunca han recibido perdón por sus pecados y donde estarán para siempre. No es que Dios nos mande al infierno, pero nosotros nos mandamos a nosotros mismos cuando no escuchamos la advertencia de Dios y recibimos su perdón por todos nuestros pecados y su regalo de la vida eterna. El infierno es un lugar donde nosotros escogemos estar cuando escogemos dejar a Dios fuera de nuestras vidas.

Eugene P. Harder compartió como, "En su libro titulado, Al Infierno y De Regreso (To Hell and Back), el Cardiólogo Maurice Rawlings cuenta la experiencia alarmante que tuvo uno de sus pacientes cerca de la muerte mientras tomaba un examen cardiaco de estrés en una noria.

"El paciente estaba batallando para respirar y comenzó a transpirar profusamente. El monitor enseño un latido del corazón rápido y peligroso. Esto fue seguido por una larga pausa en el latido y luego por una línea derecha. El corazón de Charlie había parado, sus ojos se voltearon hacia arriba y él se cayó.

"Una de las enfermeras respiro 'el beso de la vida dentro de los pulmones de Charlie.' Otra enfermera empezó el intravenoso pero el corazón no latía correctamente. Un marcapaso temporal era necesario. Cuando el Dr. Rawlings paraba de empujar el pecho de Charlie para ajustar el marcapaso, su corazón dejaba de latir. Los ojos de Charlie se volteaban hacia arriba y se ponía azul.

"Esta vez cuando el corazón de Charlie volvió a latir el estaba gritando las palabras, '¡Estoy en el infierno! ¡Estoy en el infierno! Alucinaciones, pensó el Dr. Rawlings. La mayoría de las victimas gritan, 'Quite sus manos de encima de mí, me está quebrando mis costillas.'

"Pero Charlie estaba diciendo lo contrario: '¡No pare! No pare. ¡Cada vez que me suelta estoy de nuevo en el infierno!'

"Cuando estaba consciente, Charlie le rogaba al Doctor que orara por él. Dr. Rawlings dijo, 'Me sentí francamente insultado. De hecho, le dije que se callara. Le dije que era un doctor, no un ministro y no un psiquiatra. Las enfermeras me miraban como diciendo, "¡Haga algo!"

"Así que compuse una oración de mi imaginación para quitarme la presión de Charlie. "Jesucristo es el Hijo de Dios, mantenme fuera del infierno. Si vivo, estoy enganchado. Soy tuyo." ¡Dilo Charlie!'

"Charlie dijo la oración y entonces sucedió algo muy raro que cambio las vidas del ambos el Doctor y Charlie. Dr. Rawlings dijo, 'Una conversión religiosa tomo lugar. Nunca había sido testigo de uno anteriormente. Charlie ya no era el lunático quien gritaba y era combativo quien me había estado peleando por su vida. El estaba relajado y calmado y cooperativo.'

"'Me asusto. Estaba agitado por los eventos. Esa oración de mi imaginación no solo había salvado a Charlie McKaig, pero también a mí. Era una convicción que hasta el día de hoy no lo puedo explicar. Desde entonces, Charlie ha sobrevivido tres marcapasos permanentes. Es difícil de creer que mi oración sencilla abrió en camino a la salvación de Charlie y la mía.'"

Se continuara…

Oración sugerida: "Querido Dios, por favor ayúdame a saber por seguro en mi corazón los hechos acerca del cielo y el infierno… y ayúdame a estar seguro que estoy preparado para el día que yo te conozca cara a cara y allí dar una cuenta de mi vida.* Gracias por escuchar y contestar mi oración. Te agradezco. En el nombre de Jesús, amen."

1. Mateo 10:28 (NVI).

*NOTA: Para estar seguro que está preparado para el día que conozca a Dios cara a cara, lea el artículo, "Como Estar Seguro Que Es Un Cristiano Verdadero" en: http://www.actsweb.org/sp/conocer_a_dios1.php.

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