Encuentros Diarios
Febrero 18, 2025
Nunca estamos solos
Y yo pediré al Padre y él les dará otro Consolador
para que los acompañe siempre: el EspÃritu de verdad, a quien el mundo no puede
aceptar porque no lo ve ni lo conoce. Pero ustedes sà lo conocen, porque vive
con ustedes y estará en ustedes. No los voy a dejar huérfanos; volveré a
ustedes.1
La soledad se infiltrará en nuestra vida en algún
momento. Sin embargo, como creyentes, nunca estamos solos porque Dios nos ha
dado un compañero sin igual: el EspÃritu Santo.
Ninguno de nosotros puede prometer, sin reservas,
estar siempre disponible, las realidades del tiempo, la distancia, ocupaciones
de la vida diaria pueden separar a las personas. No obstante, al enviar al
EspÃritu Santo a vivir en nosotros, Cristo cumple su promesa de nunca
desampararnos ni dejarnos (Hebreos 13:5).
Los seres humanos no fuimos creados para vivir solos.
Dios nos diseñó para ser completos solo cuando el EspÃritu Santo viene a morar
en nosotros, en el momento de nuestra salvación. Sin embargo, hay quienes eligen
ignorar al EspÃritu Santo sin darse cuenta. Por ejemplo, cuando tratan de
perseverar en la fe con sus propias fuerzas o dejan de leer la Palabra de Dios.
Esa clase de persona se caracteriza por estar descontenta: su paz ese efÃmera,
y su soledad se sentirá como un residente permanente de su corazón.
El EspÃritu Santo es nuestro parakletos, o compañero
que "camina a nuestro lado". Si lo mantenemos lejos, también nos
alejamos del Padre. Pero si le pedimos al EspÃritu Santo que guÃe nuestros
pasos y abra nuestra mente a los planes de Dios, Él nos apoyará y alentará de
maneras que ni imaginamos.
Oración sugerida: Amado Padre Celestial, gracias por
dejarnos al Ayudador, al Consolador. Gracias porque nunca estamos solos, Tu
EspÃritu Santo nos acompaña siempre para guiarnos, para dirigirnos, y para
consolarnos. Padre Amado, te pido estar consciente de Tu presencia en todo
momento para poder dar consuelo y ánimo a otras personas. Oro en el nombre de
Jesús, Amén.
1.
Juan
14:16-18 (NVI).
El Encuentro de hoy fue
escrito por: Rosina N.
|