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Encuentros Diarios
Marzo 03, 2015
Sexo y el adulto soltero
"Por tanto, hagan morir todo lo que es propio de la naturaleza terrenal: inmoralidad sexual, impureza, bajas pasiones, malos deseos y avaricia, la cual es idolatrÃa."1
Habiendo trabajado por años con solteros especialmente en el área de la recuperación por el divorcio y la pena, una pregunta que se hacÃa constantemente tenÃa que ver con la sexualidad. Como lo preguntó una persona, "¿Que tan lejos puede llegar una pareja (de solteros) con respecto a la intimidad sexual sin comprometer su integridad como cristianos?"
Escuché a un maestro decir que el sexo para los adultos solteros no era un problema porque si no estaban teniendo relaciones sexuales, pierden el deseo por ellas. Eso tiene tanto sentido como el decir si no estás comiendo pierdes el deseo por la comida. Escuché a otro maestro decir que la respuesta para el sexo y los adultos solteros era la abstinencia. ¡Ambos maestros eran casados!
Es verdad, la disciplina es ciertamente necesaria, pero la disciplina por sà sola no es suficiente. Habiendo estado soltero por varios años, yo comprendo la batalla y el reto.
¿Pero por qué nos enseña la Biblia que el sexo es solo para las parejas que están unidas en matrimonio? Hay un número de buenas razones. Es para que los niños no deseados no sean traÃdos a este mundo – o bebes sin una madre o un padre que los cuide. Es la protección contra enfermedades … incluyendo enfermedades mortales como el SIDA. Además cuando una pareja se involucra sexualmente de forma rápida, ellos entran en una unión fÃsica sin estar unidos de una manera sana tanto en lo emocional como en lo espiritual. Además la intimidad puede cegar a la pareja a la realidad y causar que ellos ignoren las debilidades importantes en el carácter de su pareja. Puede parar su crecimiento como personas sanas y fácilmente convertirse en una adicción. Puede dejar a las parejas con sentimiento de culpabilidad y destruir lo que pudo haber sido una maravillosa relación.
¿Cómo puede enfrentar la atracción sexual la pareja que elije vivir en armonÃa con el mandato de Dios y dejar el sexo para después del matrimonio?
Primero, se aconseja mantenerse en contacto con amigos de confianza o un grupo de amistades del mismo sexo.
Segundo, es bueno tener intereses para que asà usted pueda subyugar sus impulsos sexuales vertiendo su energÃa en algo creativo y satisfactorio como el servir a los demás, el tener un pasatiempo, o un trabajo en los cuales usted puede poner su corazón y su mejor esfuerzo.
Tercero, asegure de llenar sus necesidades en forma legÃtima. Por ejemplo, tenemos necesidades en varias áreas de atracción (además de la necesidad sexual) tales como las siguientes:
1. Necesidad sexual – el compartir ideas mutuas
2. Necesidad social – el estar y compartir socialmente con amistades de confianza de ambos sexos.
3. Necesidad emocional – el compartir en forma honesta nuestros sentimientos con amistades de confianza y desarrollar relaciones sanas sin ser románticas.
4. Necesidad espiritual – relacionarse y mantenerse en contacto con Dios y vivir en armonÃa con su voluntad.
Todas estas necesidades se pueden llenar fuera del matrimonio y pueden ser de gran ayuda para esperar hasta el matrimonio para llenar las necesidades sexuales de la pareja. Sin embargo, si no llenamos estas necesidades en forma saludable, nos exponemos a la tentación en un intento vano de satisfacer nuestras necesidades a través de encuentros sexuales. ¡Qué gran error!
Cuarto, lo más importante es asegurase que la pareja este entregada a Dios y a su voluntad. Esto incluye ser célibes hasta el matrimonio. Orar juntos y sobre todo, entregar y confiar sus vidas y sus relaciones a Dios todos los dÃas.
Quinto, no se permitan estar en lugares y situaciones comprometedoras dónde ustedes saben que se exponen a la tentación.
Sexto, Si ya han caÃdo en la tentación sexual, pidan perdón a Dios y empiecen de nuevo decidiendo con la ayuda de Dios y planeando inteligentemente el no caer en la tentación sexual.
Se sugiere la siguiente oración: "Querido Dios, gracias por crearnos hombres y mujeres, y por el regalo de la sexualidad. Con tu ayuda elijo vivir en armonÃa con tu voluntad. Te entrego mi sexualidad. Ayúdame a llenar mis necesidades en maneras legÃtimas para no ponerme en la tentación y caer en la inmoralidad sexual. Gracias por escuchar y responder a mi oración. Te agradezco. En el nombre de Jesús, Amén."
1. Colosenses 3:5 (NVI).
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