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Encuentros Diarios
Septiembre 02, 2015
Controladores
“Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen. Mas al extraño no seguirán, sino huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños.”1
EL Pastor Vernes Aresn escribe como “en una ocasión conoció a alguien que era el líder de la congregación. A través del tiempo esta persona había ocupado diferentes puestos de liderazgo dentro de la iglesia. Más que eso, sin embargo, en muchas ocasiones él era el que se ofrecía de voluntario para aquellos trabajos sucios y difíciles que nadie más quería hacer: lavar los platos después de un convivio, ayudar con la clase de confirmación, llenar la despensa del banco de comida.
“Este es el tipo de persona que desearíamos clonar y con los cuales nos gustaría llenar la congregación ¿verdad? ¡Pues no es así! Era agradable estar con esta persona hasta que las cosas no se hacían de acuerdo a lo que él decía, y entonces era una pesadilla; interrumpía, dividía y hasta llegaba a ser destructivo. El no comprendía el significado de comunidad y no sabía jugar como parte del equipo. Y cuando él y su esposa se subieron a su coche y se fueron después de una discusión (y no fue la primea ocasion), la congregación finalmente tuvo el buen sentido común de no rogarles que regresaran. Finalmente la congregación aprendió a distinguir entre la voz del pastor y la voz del extraño.”2
Otra descripción de este tipo de persona es la del controlador. Algunas veces, después de un numero razonable de reprendidas, la cosa más amable que podemos hacer es pedirles que se vayan. Entre más sedamos a ellos, nos convertimos en parte de su enfermedad la cual es una inseguridad terrible. Es interesante notar que, en los tiempos de Jonás, cuando fue lanzado sobre la borda del barco ¡todo estaba quedo en calma!
Se sugiere al siguiente oración: “Querido Dios, por favor permite que nunca sea un controlador y por consiguiente intente hacer el papel de Dios en la vida de los demás. Si en alguna ocasión lo soy, por favor abre mis ojos para que pueda ver lo que estoy haciendo y ayúdame a cambiar mi forma de ser. Gracias por escuchar y responder a mi oración. Te agradezco. En el nombre de Jesucristo, Amén.”
1. Juan 10:27, 5.
2. "(Good) Help Wanted," por el Rev. Verne Arens.
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