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Encuentros Diarios
Octubre 18, 2016
Curando en los hombres las heridas de los padres
“Y ustedes, padres, no hagan enojar a sus hijos, sino crÃenlos según la disciplina e instrucción del Señor.â€1
A pesar de lo que algunas mujeres liberales, homosexuales, lesbianas que van a ser padres, y madres teniendo a sus hijos fuera del matrimonio (para justificar sus acciones), claman acerca de que los padres no son importantes para el desarrollo y el bienestar del niño, el hecho permanece, el plan de Dios para la paternidad y la vida de familia no ha cambiado, y no se puede subestimar el papel tan significativo del padre (asà como de la madre).
“De acuerdo al Dr. T Berry Brazelton, la participación del padre incrementa el coeficiente intelectual de los niños, los motiva a aprender, y les da confianza en sà mismos. Además, los niños con padres que se preocupan por ellos tienen más posibilidades de desarrollar el sentido del humor asà como a ser entusiastas.â€2
Tambien es Interesante que el Dr. Frank Minirth reporta que “una encuesta reciente reveló como los niños están aprendiendo los valores:43 por ciento de sus padre, 38 por ciento de la televisión, 8 por ciento de sus amigos y 6 por ciento de los maestros.â€3
“Los Lakers de Los Ãngeles acaban de terminar 13 juegos en 10 ciudades en 21 dÃas. Fue particularmente difÃcil para Dominic Harris de 5 años, el hijo de Ann Harris y el entrenador de Los Lakers Del Harris. Dominic le dijo a Del: “Te extraño papá. Es mas no puedo recordar cuando no te he extrañado.â€4
Pregunten a un grupo de cien hombres cuántos de ellos se sentÃan cercanos y a sus padres y verán solo unas tres o cuatro manos levantarse. Dentro de esto está el secreto de la mayorÃa de nuestro estrés emocional. Las heridas de los padres que lastimaron nuestra alma masculina son porque nunca nos sentimos amados por nuestros padres. Y esas heridas necesitan sanar desesperadamente. (El mismo principio aplica a las mujeres que llevan por dentro esa misma herida).
Hablando en forma personal, desde la niñez yo empecé a buscar amor en los lugares equivocados en un intento vano de llenar el vacÃo causado por mi padre quien estaba emocionalmente ausente.
Por ejemplo, en el pasado busque el amor en las cosas que hacia—haciendo cosas bellas incluyendo la casa de mis sueños. Aprendà a conmover hasta las lagrimas a grupos de personas, a hacerlos reÃr histéricamente y a inspirarlos a alcanzar metas nobles. Recibà mucha aprobación pero ninguna de estas cosas me hizo sentir amado. En otras palabras, equivocadamente confundà la aprobación con el amor.
Tal vez el más elusivo de todos es como, por mucho tiempo y desde temprana edad, busque en el sexo opuesto tratando de sentirme amado y para confirmar mi masculinidad. Todo empezó cuando yo era un niño. Aun recuerdo como me enamore perdidamente de mi maestra de segundo grado, buscando encontrar el amor en ella.
Desafortunadamente, ni una madre, esposa u otra mujer pueden hacer que un niño o un hombre se ame a sà mismo. Una mujer atractiva lo podrÃa hacerse sentir muy bien por un corto periodo de tiempo, pero aun asà ella no puede hacer que él se sienta amado o de que es un hombre sin importar que tan atractiva este ella. Un hombre puede aun sentirse intoxicado por la pasión cuando conoce a una bella mujer y desea casarse con ella. Si lo hace, ambos tendrán un rudo despertar. Y no por ella, pero por él. Cuando su pasión se apague, él tendrá que enfrentarse con el dolor y la realidad de su soledad y su vacio.
Y entonces para evitar enfrentar su dolor, el buscara algo mas, subir una montaña, o buscar a otra bella mujer… y a otra… para probarse a si mismo que él es todo un hombre. O buscará amortiguar su dolor interno a través del alcohol, las drogas, comportamientos adictivos y aun arruinar su salud y nunca poder acercarse a los que él ama o arruinar esas relaciones. Esto es, él continuará actuando asà hasta que se enfrente al porque de que él busque en los lugares equivocados por el amor de su padre (y/o su madre) que nunca recibió de niño.
Espero que el Encuentro Diario de hoy ayude a todos los padres a comprender lo importante que es el participar en forma emocional y espiritual en las vidas de sus hijos. Y para aquellos de nosotros que tenemos una herida de ese tipo, detengamos nuestros locos intentos de adormecer el dolor de nuestro vacio interno, admitamos la verdadera necesidad de nuestro corazón, y busquemos la ayuda de Dios y de un consejero de confianza de ser necesario para encontrar la curación a nuestras heridas.
Se sugiere la siguiente oración: “Querido Dios, (para aquellos de nosotros que tenemos hijos—especialmente los padres) por favor ayúdame a ser el padre que tú planeaste que yo sea para mis hijos. Ayúdame a siempre ser como Cristo para ellos, y que ellos crezcan sabiendo que son muy amados tanto por mà como por ti. Y (para todos nosotros que llevamos esa herida), por favor ayúdame a enfrentar la herida y llévame hacia la ayuda que necesito para sanar y recuperarme para que asi pueda convertirme en el padre y hombre de familia que tu planeaste que yo fuera. Gracias por escuchar y responder a mi oración. Te agradezco. En el nombre de Jesucristo, Amén.â€
1. Efesios 6:4 (NVI).
2. Fuente: Victor Parachin, "The Fine Art of Good Fathering," Herald of Holiness, Febrero 1995, pp. 32-33.
3. Dr. Frank Minirth, "Withstanding the Tides of Change," Today's Better Life, p. 52.
4. Lexington Herald-Leader, 1ro de Enero de 1996, p. C2.
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