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Encuentros Diarios
Mayo 23, 2016
Una oración para el tiempo de Guerra
“No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús.â€1
Ravi Zacharias comparte cómo, “En la conferencia histórica de Amsterdam para los evangelistas ambulantes en 1986, el renombrado locutor coreano, Billy Kim, contó la historia de un soldado americano que se ocultaba en una trinchera durante la guerra de Corea. Cuando su comandante le ordenó rescatar a algunos de sus compañeros caÃdos en el frente, el soldado asintió con su cabeza, tomó un vistazo a su reloj, se quedo inmóvil hasta que su oficial en jefe estuvo fuera de su vista, y no hizo ningún movimiento. Pasaron varios minutos, y un colega le recordó de su asignación de rescatar a sus compañeros. De nuevo él miró su reloj y se entretuvo una vez más. Finalmente, él saltó de la trinchera y en forma audaz comenzó a llevar a sus compatriotas a un lugar seguro.
“Al final del dÃa, un amigo le pidió que le explicará sus acciones. El soldado respondió, ‘tuve miedo porque sabia que no estaba listo para morir. Espere hasta que supere mis temores – recordando que mi madre me habÃa dicho que ha cierta hora ella orarÃa por mÃ. Entonces supe que no importaba lo que me esperara, yo le podrÃa hacer frente.’â€2
Orar es importante. La oración cambia cosas. La oración es un poderoso medio para conectarse con el Dios de lo eterno. Estoy muy agradecido por todos los que oran diariamente por mà y por nuestro ministerio. Estoy muy agradecido porque puedo orar todos los dÃas por mis seres queridos y confiarlos al cuidado de Dios. Y cuan agradecidos están nuestros soldados de que sus seres queridos y sus amigos también están orando por ellos.
Y a medida que las guerras y los actos del terrorismo continúan, y mientras que se continua persiguiendo y matando a los cristianos en varias partes del mundo, continuemos orando por los hijos de Dios, y que el dÃa del regreso de Cristo sea pronto de modo que en el tiempo de Dios todas las guerras, sufrimientos, enfermedades y hambre, finalmente terminen para siempre. Oren, también, para que cada persona en el mundo tenga la oportunidad de oÃr el evangelio de salvación de Jesucristo y de aceptar el perdón de Dios y el regalo de la vida eterna.
Se sugiere la siguiente oración: “Querido Dios, gracias porque Tu Palabra nos motiva a orar sin cesar. Ayúdame a hacer esto y también a orar de acuerdo a tu voluntad para tener la seguridad de que mis oraciones tendrán respuesta. Y hoy pido por todos los que sufren en tu nombre para que los protejas de las manos de los malvados. Y concede que nosotros los cristianos hagamos todo lo que esté en nuestras manos para unirnos a aquellos que están llevando el evangelio a todas las esquinas de la tierra para que tu evangelio pueda ser proclamado en todo el mundo y asà tu regreso sea pronto. Gracias por escuchar y responder a mi oración. Te agradezco. En el nombre de Jesús, amen.â€
1. Filipenses 4:6-7 (NVI).
2. Una rebanada del infinito, http://www.sliceofinfinity.org. (Solo en inglés)
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