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Encuentros Diarios
Febrero 22, 2017
Lo que ve es lo que es
“A las montañas levanto mis ojos; ¿de dónde ha de venir mi ayuda? Mi ayuda proviene del Señor, creador del cielo y de la tierra.â€1
PolÃtica: Sin carácter y ética, el capitalismo y la democracia no pueden sobrevivir por largo tiempo. El mentir, engañar, alterar los libros, la irresponsabilidad y el egocentrismo son autodestructivos. Siempre cosechamos lo que sembramos—aunque sea eventualmente.
Lo mismo sucede con la polÃtica. Quizás como nunca antes necesitamos urgentemente de polÃticos capaces; y estoy agradecido por aquellos que son reales, responsables y honestos y tienen en el corazón el mejor interés del pueblo al que sirven—no necesariamente darles lo que quieren, pero siempre buscando proporcionar, en la medida de lo posible, lo que realmente necesitan. Hoy, por desgracia, la palabra “polÃtica†se ha vuelto una palabra malsonante debido a los polÃticos que están más interesados en servirse a sà mismos y hacer todo lo posible para mantenerse en el poder para servir a los deseos y los intereses especiales de la mayorÃa de sus constituyentes, o para aquellos que les dan el mayor apoyo financiero. Pero también hay quienes descaradamente culpan a otros por los problemas que ellos mismos ayudaron a crear; aquellos que mienten, son atrapados en la mentira y dicen que fue un malentendido; aquellos que buscan desenterrar la suciedad para destruir a sus oponentes; y otros que preparan sus informes para hacerlos a decir lo que ellos quieren decir.
Lamentablemente, algunas personas también son asÃ. Somos como “dos pájaros que vuelan sobre los desiertos de nuestro paÃs: uno es el colibrà y el otro es el buitre. Los buitres encuentran la carne podrida del desierto, porque eso es lo que buscan. Ellos sobreviven con esa dieta. Pero los colibrÃes ignoran la carne maloliente de los animales muertos. En su lugar, buscan las coloridas flores de las plantas del desierto. Los buitres viven en lo que era. Ellos viven en el pasado. Se llenan a sà mismos con lo que está muerto. Pero los colibrÃes viven en lo que es. Buscan nueva vida. Ellos se rellenan de frescura y vida. Cada ave encuentra lo que está buscando. Todos lo hacemos.â€2
Si buscamos el bien en otros, es lo que encontraremos. Si buscamos suciedad, es lo que nos encontraremos. El mismo principio se aplica a la forma en la que la gente ve a Dios. Si queremos verle lo podemos hacer—en todas partes en las que busquemos. Si no queremos verle, no lo haremos. El hecho sigue siendo, la gente ve exactamente lo que quieren ver, escucha lo que quiere oÃr, encuentra lo que quiere encontrar y hace lo que quiere y decide hacer.
Como Frederick Langbridge lo dijo, “Dos hombres miran por las mismas rejas de la prisión; uno ve el fango y el otro las estrellas.†Lo que buscas es lo que verá y lo que obtendrá.
Se sugiere la siguiente oración: “Querido Dios, por favor ayúdame a ser honesto conmigo mismo y contigo para que yo pueda ver más claramente la verdad tal como es y no lo que yo deseo que sea. Y, mientras que no esté cegado por la decepción, ayúdame a buscar las estrellas y no el fango. Gracias por escucharme y responder a mis oraciones. Te agradezco. En el nombre de Jesús, amén.â€
1. Salmos 121:1-2 (NVI).
2. Autor desconocido.
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